lunes, noviembre 24, 2008

Cerrar los ojos es perder

No se puede vivir con los ojos cerrados, no. En eso estamos todos de acuerdo.
Lo que podríamos debatir, pensar, reflexionar y especificar hasta el hartazo es el concepto de tener los ojos cerrados. Por más que algún escéptico vilipendioso diga "obviamente es tener los párpados bajos", me parece que el sentido metafórico de esta frase merece un análisis más exhaustivo.
No siempre tener los ojos abiertos es estar mirando. Más de uno y más de dos han perdido su vista, sin darle mayor importancia a lo que la retina les relfeja, profundamente inmersos en banalidades, dislates o rebuscados razonamientos.
Ese es el ejemplo más perezoso, claro. Podemos ocuparnos también de la gente que, como dice alguna canción, mira y no ve. Es impepinable el hecho de que muchas personas pasan de la mayoría de los hechos con cierto desinterés, conservando para sí lo más superficial del mundo que las rodea. Así, tal vez sin querer, tal vez por mero supino, el individuo deja pasar la oportunidad única de encontrarse con una imágen inigualable. O quizás sea afortunada, y años después vea esa imágen que se perdió retratada por un fotógrafo y se maraville. Cualquiera sea el caso, es mejor no darle a la belleza del mundo la oportunidad de escaparse vilmente, sin pasar siquiera por el ojal de nuestra mirada.
Caso aparte son los que deciden, voluntariamente, mirar para otro lado. No hay peor ciego que el que no quiere ver. Es lo más horrible que puede hacer una persona, pues por miedo a ver algo que le disguste, se desencuentra con la realidad. La realidad inamovible, perenne y vitalicia. Siempre estará a la espera, vigilando cuidadosamente hasta el momento en que miremos en su dirección. Entonces será inevitable, el cambio viajará a través de nuestras pupilas y anclará en nuestro pecho. Más allá de todo filtro, más allá de todo cuento, de todo embuste, de toda andrómina. La vida misma ante tus ojos y el más poderoso imperativo, surgiendo desde lo más recóndito de tu sistema nervioso: la necesidad de actuar.

Notas marginales
-Puse algunas palabras "raras" en el texto por pura diversión. Cualquier cosa pregunten.
-Mi bisabuela cumplió 98 años. Le regalaron un lemoncello. Se quejó porque compramos helado y no le compramos sambayón. Si, ese que tiene vino. Una ídola.
-Me encanta empezar a escribir y perderme entre las palabras. Es hermoso escribir sin esquemas, sin ninguna meta en particular. Escribir por escribir.

martes, noviembre 18, 2008

Poema a destiempo

Para la chica de musculosa roja, sentada en el norte 11, tercer asiento doble del lado de la ventanilla, a las 8 y media, en el crepúsculo.

Dicen los que hablan de la belleza
que no posee pies ni cabeza
pero tiene todo eso, hermosos ojos,
y justo hoy anda vestida de rojo.

Berreta, sí, y muy, pero lo pensé en un par de minutos. Lamentablemente no lo suficientemente rápido como para dárselo. De cualquier modo, por más simple que sea... ¿A qué mujer no le gusta una poesía inspirada en ella?

*Borrador del 13/11

Tengo algunas cosas pensadas, pero este no es el momento para parirlas.
Es que empecé a ir a la psicóloga, y no puedo parar de pensar en MI.

sábado, noviembre 08, 2008

Max

Quería intentar vivir tan sólo aquello que tendía a brotar espontáneamente de mí , ¿por que habría de resultarme tan difícil?

Así comienza Demián, de Hermann Hesse

lunes, noviembre 03, 2008

Este es un posteo meramente informativo

NO me voy a prender en la gilada esa de los seguidores.
Si nos ponemos a hacer eso corremos el riesgo de terminar como floggers, pidiéndonos "poneme en tus seguidores y yo te agrego de reverse". No les voy a dar la oportunidad, monstruos.