jueves, octubre 23, 2008

El derecho de soñar, por Eduardo Galeano


Pueden verlo o leerlo. Este blog da libertad de opción, ustedes tienen el poder. De cualquier modo, un servidor recomienda tomarse cinco minutos para verlo y escucharlo, es mucho más lindo, y llega mucho más, si se le presta atención.

Vaya uno a saber cómo será el mundo más allá del año 2000. Tenemos una única certeza: si todavía estamos ahí, para entonces ya seremos gente del siglo pasado y, peor todavía, seremos gente del pasado milenio.

Sin embargo, aunque no podemos adivinar el mundo que será,

bien podemos imaginar el que queremos que sea. El derecho de soñar no figura entre los treinta derechos humanos que las Naciones Unidas proclamaron a fines de 1948. Pero si no fuera por él, y por las aguas que da de beber, los demás derechos se morirían de sed.

Deliremos, pues, por un ratito. El mundo, que está patas arriba, se pondrá sobre sus pies:

El televisor dejará de ser
el miembro más importante de la familia,
y será tratado como la plancha o el lavarropas.

La gente trabajará para vivir,
en lugar de vivir para trabajar.

En ningún país irán presos
los muchachos que se nieguen
a hacer el servicio militar,
sino los que quieran hacerlo.

Los economistas no llamarán
nivel de vida al nivel de consumo,
ni llamarán calidad de vida
a la cantidad de cosas.

Los cocineros no creerán
que a las langostas les encanta
que las hiervan vivas.

Los historiadores no creerán
que a los países les encanta
ser invadidos.

Los políticos no creerán que
a los pobres les encanta
comer promesas.

El mundo ya no estará en
guerra contra los pobres,
sino contra la pobreza, y la
industria militar no tendrá más
remedio que declararse
en quiebra por siempre jamás.

Nadie morirá de hambre, porque nadie
morirá de indigestión.

Los niños de la calle no serán
tratados como si fueran basura,
porque no habrá niños de la calle.

Los niños ricos no serán tratados
como si fueran dinero,
porque no habrá niños ricos.

La educación no será el privilegio
de quienes puedan pagarla.

La policía no será la maldición
de quienes no puedan comprarla.

La justicia y la libertad, hermanas
siamesas condenadas a vivir
separadas, volverán a juntarse, bien
pegaditas, espalda contra espalda.

Una mujer, negra, será
presidente de Brasil y otra mujer,
negra, será presidente de los
Estados Unidos de América.
Una mujer india gobernará
Guatemala y otra, Perú.

En Argentina, las locas
de Plaza de Mayo serán
un ejemplo de salud mental,
porque ellas se negaron a olvidar
en los tiempos de la amnesia
obligatoria.

La Santa Madre Iglesia corregirá
algunas erratas de las piedras
de Moisés. El sexto mandamiento
ordenará: "Festejarás el cuerpo".
El noveno, que desconfía
del deseo, lo declarará sagrado.

La Iglesia también dictará
un undécimo mandamiento,
que se le había olvidado al Señor:
"Amarás a la naturaleza,
de la que formas parte".

Todos los penitentes serán
celebrantes, y no habrá noche
que no sea vivida como si fuera
la última, ni día que no sea vivido
como si fuera el primero.

Como siempre, nobleza obliga. Si no fuera por Eri, no lo habría conocido. Tal vez sí en otro momento, pero no ahora. Asique, gracias.

23 comentarios:

Anónimo dijo...

Tan lindo que me dejo sin palabras.

Besos bonitos

JuanM dijo...

Muy bueno

pily dijo...

ya lo conocia.. es exelente!

Florencia dijo...

Lo conocía, es muy bueno. Saluuuudos

hsm1967 dijo...

Lo conocía,pero nunca está de más refrescarlo y ni que hablar por estos años.

m. dijo...

lo respeto mucho a galeano pero es un soGnador a lo john lennon.

Al margen, a veces por jugar con las palabras, o mejor dicho, por priorizar el jugar con las palabras, se dicen cosas que no son tan así. Bah, digo, qué sé yo. Desconozco historiador alguno que sostenga que a un pueblo invadido le encantó la experiencia, por ejemplo, y en mis tiempos de cocinera siempre me negué a hacer langosta porque yo era cocinera, no asesina, en fin...
cómo andás guille, la facu?

Guille dijo...

Es soñador a lo John Lennon, no te lo niego. Pero acá en el cuerpo técnico de este barco ligeramente atimonado, somos todos soñadores, asique lo posteado se condice con los ideales.

La facu está bien, pero no me quiere mucho. Entonces para no hacerla sentir mal, la visito solo de vez en cuando.

Vos cómo estás m?

Anónimo dijo...

Un grande Galeano!!!

Besos

m. dijo...

bien, cansada, se me vienen los eSámenes se me vienen.

Guille dijo...

Son como la muerte querida m, nos llega a todos.

Aunque proporcionalmente la muerte es más piola, se aparece una sola vez, en cambio estos hijos de puta...

ChaPa ((( 22 ))) dijo...

Y suerte que lo conocistes...


MONUMENTO PARA ELI!



ChaPa ((( 22 )))

Unknown dijo...

El televisor dejará de ser
el miembro más importante de la familia,
y será tratado como la plancha o el lavarropas.

La gente trabajará para vivir,
en lugar de vivir para trabajar.

Ojalá.

Unknown dijo...

muy bueno! simplemente eso...

Dalma dijo...

que puedo decir de mi compatriota... es un grande

el soñar ... ya mas que un derecho deberia ser un deber

besos Guille!

huellas compartidas dijo...

Un grande Galeano. Ahora me estoy encontrando con un pasado que me suena muuuy contemporáneo en su libro "espejos"...
Gracias por compartirlo !
Besos guille

Florencia dijo...

Ya te conté por qué modero los comentarios, tiempo sin hablarnos y ya te olvidaste :O

ChaPa ((( 22 ))) dijo...

¿Así que querés sentarte con El Chapa en la reunión?


Eso va a estar re piola gato del plan... Nada mas que te recuerdo... Soy una bola...



ChaPa ((( 22 )))

m. dijo...

totalmente, la muerte es más piola ;)

deadly brunette dijo...

menos mal que me hiciste soñar durante todo el texto(que no lo conocía) porque al principio me dejaste preocupada no sabía que soñar no estaba entre los derechos humanos! que horrible.. soy una ignorante

Anónimo dijo...

Excelente Guille!!

me encantó...

besote

Florencia dijo...

Bueno, a mí me molestaba leer la sarta de pelotudeces que ponían, por eso recurrí a eso. ¡Y no me grites che!

Luna dijo...

Galeano siempre asombra con su claridad.
No son, en su mayoría, los sueños de todos?

Besos

Guillermina dijo...

Aguante Galeano
y sus hermosos libros.

Saludos!